Resumen
El volcán de Colima es el más activo de México. Esta actividad ha incluido una erupción efusiva significativa en 1991. En enero de 1996 se inició un monitoreo geoquímico con: 1 ) mediciones de los flujos de S02 en la atmósfera mediante COSPEC; 2) recolección de gases fumarólicos del cráter cada tres meses; 3) recolección de muestras de agua de tres manantiales ubicados en los flancos S-SO del volcán, cada dos meses. La composición química de los gases volcánicos no mostró tendencias sistemáticas, a excepción de la composición isotópica del vapor volcánico. A partir del verano de 1997, el agua del volcán se enriqueció gradualmente en deuterio. lo que indica una contribución de magma profundo, menos desgasificado. Se identificaron otras tres posibles señales precursoras para la erupción de 1998-99: 1) un pico de dos a tres veces en la concentración de boro aproximadamente 3 meses antes de la erupción, 2) un incremento gradual de HC03 y de Ja presión parcial calculada de C02 disuelto, aproximadamente l.5 años antes de la empción, y 3) hasta septiembre de 1998. el flujo de S02 del volcán se mantuvo a niveles bajos de menos de 100 t/d, a menudo bajo el límite de detección del instrumento. Un mes antes del inicio de Ja ernpción se registró un incremento agudo en el flujo de S02, de 400 ± 50 t/d hasta 1600 t/d dos días antes del surgimiento de nueva lava el 20 de noviembre de 1998. El flujo de S02 presentó una buena correlación con la sismicidad.
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